La voz de los alcaldes: Carlos Vázquez Quintián, alcalde de Vilarmaior

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Carlos Vázquez Quintián, alcalde de Vilarmaior, repasa su trayectoria desde operario municipal a regidor, los retos de un ayuntamiento rural centrado en mejorar los servicios básicos y el objetivo de impulsar un polígono industrial que atraiga empleo y nuevas familias
Vilarmaior carlos alcalde
14 Dec 2025

Carlos Vázquez Quintián, alcalde de Vilarmaior, un municipio con 1.252 habitantes, repasa en esta entrevista su trayectoria desde trabajador municipal hasta regidor y analiza los principales retos del ayuntamiento, centrados en la mejora de los servicios básicos, el impulso del polígono industrial y la fijación de población.

Explíquenos un poco cómo se inició en política y cómo se vinculó a su partido.
Yo me inicié en política porque soy trabajador del Ayuntamiento. Soy operario de servicios múltiples y el anterior alcalde empezó a delegar en mí cosas importantes. Teníamos muy buena relación y, a raíz de ese trabajo conjunto, fue como acabé vinculándome al Partido Popular y dando el paso a la política municipal.

¿Cómo dio el salto o recibió el impulso para ser alcalde?
El impulso viene precisamente de ese alcalde. Él ya era algo mayor y me dijo: 'Tienes que quedarte tú, tienes que ser el alcalde'. Yo al principio no quería, porque estaba bien como funcionario y no me apetecía meterme en ese follón, pero insistió en que yo tenía que quedarme de alcalde. Así fue como di el salto.

A nivel personal, ¿qué sacrificios supone formar parte del Gobierno del Ayuntamiento?
Supone estar disponible todos los días, también sábados y domingos, para cualquier problema que pueda surgir. Si eres un vecino más, un incendio o un vertido puede no afectarte directamente, pero como alcalde tienes que estar siempre presente y atento a todo.

¿Y beneficios?
El beneficio es ver que el trabajo da frutos: haces obras, mejoras servicios y ves a los vecinos contentos, que te dicen: 'Gracias, alcalde, necesitábamos esto'. En mi caso, por ejemplo, construimos un centro de salud maravilloso, un polideportivo y una Casa da Cultura. Te da alegría ver que la gente utiliza esas instalaciones, porque significa que eran necesarias.

¿Cuáles son sus objetivos a nivel político?
A nivel político, en nombre del Ayuntamiento, uno de los grandes objetivos es desarrollar un polígono industrial. También quiero conseguir que todo el municipio tenga abastecimiento de agua (estamos alrededor del 75 % y quiero llegar al 100 %) y mejorar la recogida de aguas residuales para evitar contaminar las traídas particulares y los manantiales. En resumen, seguir mejorando los servicios básicos de un ayuntamiento rural.

¿Y como Gobierno de cara a la próxima legislatura?
De cara a la próxima legislatura, lo principal es terminar esas cosas que ya están en marcha: completar la red de agua y saneamiento, avanzar con el polígono industrial y consolidar los servicios e infraestructuras que tenemos.

¿Está a favor de los pactos para conformar un Gobierno estable?
Si es para tener un Gobierno estable, sí. Los pactos son pactos y hay que tratarlos, pero si sirven para darle estabilidad al Ayuntamiento y mejorar las cosas, estoy a favor.

¿Cuáles son las principales líneas de su programa?
Las líneas principales son desarrollar el polígono industrial, completar el abastecimiento de agua y el alcantarillado en todo el municipio, mantener y potenciar las instalaciones que tenemos (piscina, Casa da Cultura, polideportivo, centro de salud) y poner en valor nuestro medio rural, con rutas de senderismo, molinos, etc., adaptadas a la realidad de un ayuntamiento pequeño como Vilarmaior.

¿Cuáles considera que son las principales necesidades del ayuntamiento?
Al ser un ayuntamiento rural y pequeño, no necesita grandes macroproyectos, pero sí buenas condiciones de vida: generar actividad y empleo con el polígono industrial para que se asienten familias, apoyar a los pequeños autónomos y seguir cuidando los servicios que ya tenemos.

¿De qué proyectos se siente más orgulloso?
Si tengo que decir uno, del centro de salud. Pero también me siento muy orgulloso del polideportivo y de la Casa da Cultura, donde se hacen muchas actividades, especialmente en fechas como la Navidad, y que dan vida cultural al ayuntamiento.

¿Qué le gustaría que los vecinos viesen en usted como alcalde?
Me gustaría que me viesen como una persona responsable y trabajadora. Que vean que, cuando me piden algo y está en mi mano, intento conseguirlo, ya sea con el Ayuntamiento o buscando ayuda de otras administraciones, para que tengan ese servicio que necesitan.

¿Cómo es su relación con la oposición?
La relación es buena, no hay ningún problema. Cuando presentan alguna propuesta que es positiva para el Ayuntamiento, miramos de aprobarla y llevarla a cabo, aunque venga de la oposición. Todo lo que sea mejorar, bienvenido es.

 


EN CLAVE PERSONAL

  • Edad, estado civil y familia.
    Tengo 55 años y estoy casado.
  • Profesión y formación.
    Soy operario de servicios múltiples del Ayuntamiento, funcionario fijo en excedencia por la política, y de formación tengo EGB.
  • Si no fuera alcalde, ¿qué le gustaría ser?
    Me gustaría ser chófer. Tengo todos los carnés y siempre me gustó ese trabajo.
  • ¿Qué quería ser de mayor?
    De pequeño también quería ser chófer; tenía las ideas bastante claras desde el principio.
  • ¿Qué hace para desconectar?
    Me gusta ir a pescar, tanto al mar como al río. Vas, comes un bocadillo, tomas una cerveza en la orilla y te olvidas un poco de todo.
  • Una virtud y un defecto.
    Como virtud, creo que soy serio y responsable. Como defecto, soy bastante inquieto: cuando tengo algo en la cabeza tengo que hacerlo y no descanso hasta dejarlo listo.
  • Un libro.
    'Verdades como puños', de Iñaki Gabilondo, que además me regaló un vecino.
  • Una película.
    'De profesión, duro'.
  • Un grupo de música/cantante.
    Américo.
  • Una afición.
    La pesca. Y también reunirme con los compañeros para hacer una buena churrascada.
  • Un lugar que visitar.
    Me gustaría visitar Nueva York algún día. Y, de un lugar que conozco y recomiendo, el área recreativa Miño das Ferreiras, muy bonita para pasear, incluso con mascotas.
  • Una comida y una bebida.
    Pulpo, churrasco y Coca-Cola.
  • Un personaje admirado.
    El anterior alcalde, don José Benito Souto Louride, y su esposa. Eran personas maravillosas, y no lo digo solo porque me metieran en política.
  • Una posesión preciada.
    Lo más preciado es la familia. Y, si hablamos de objetos, me gustan mucho los relojes; tengo seis o siete, aunque no son caros.
  • Un deseo.
    Salud y felicidad.
  • Algo para olvidar.
    La pandemia de la covid.
  • ¿Qué es lo que más valora en una persona?
    La seriedad y la formalidad. Si no hay eso, para mí ya no hay mucho que hablar.
  • ¿Cómo equilibra la vida pública y la privada?
    En el Ayuntamiento atiendo a las cosas del Ayuntamiento y en casa a las de la familia, aunque es cierto que muchas veces te llevas las preocupaciones políticas a casa. Ayuda mucho salir, ir a pescar o hablar con un vecino para desconectar un poco.
  • ¿Usa redes sociales y WhatsApp?
    Uso WhatsApp. Facebook no tengo, porque a veces en esas redes se habla y se opina de todo y prefiero evitarlo.
  • Un desafío pendiente.
    El gran desafío es desarrollar el polígono industrial, que se asienten empresas y autónomos, que vengan familias a vivir y trabajar aquí y que el ayuntamiento crezca: más padrón, más movimiento, más servicios.
  • ¿Dónde se ve en cinco años?
    En política nunca se sabe. Sí puedo decir que en las próximas elecciones pienso presentarme otra vez; después, Dios dirá. También depende de si uno sale elegido y de cuánto falte para la jubilación.
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