El BNG de Bergondo reclama soluciones a los daños provocados por las obras del cruce de Guisamo

Tras más de una década de reivindicaciones, el Gobierno del Estado completó la reforma del punto negro de siniestralidad en el cruce de Ferrol en Guisamo, una obra que no estuvo exenta de polémica debido a su larga duración y una estética final que, según el BNG de Bergondo, no encaja con el entorno. Pero lo más grave, apunta el partido nacionalista, es que durante la ejecución de las obras se produjeron desperfectos en las viviendas próximas que aún no han sido reparados ni se les ha dado respuesta.
“Hoy, que el delegado del gobierno tuvo ocasión de comprobar estos desperfectos, pudo comprometerse a solucionar esta problemática, que sus propiedades queden, ni más ni menos, como estaban antes de las obras. Lamentable e incomprensiblemente, hasta donde pudimos saber, el delegado guardó silencio ante la vecindad, con el beneplácito del Gobierno municipal con su alcaldesa, también del PSOE, al frente”, denunció el portavoz del BNG en Bergondo, David Carro.
El BNG recordó que esta situación ya fue advertida tanto en el pleno municipal como a través de iniciativas del diputado Néstor Rego en el Congreso, pero aún así sigue sin resolverse. Además, Carro pidió que el Gobierno local aprovechase la visita para recordar al delegado del Gobierno las “múltiples deudas pendientes” que el Estado tiene con Bergondo, entre ellas “la pasarela peatonal de Bos, la problemática de las inundaciones, la humanización del centro de Guisamo, la mejora para cruzar con seguridad en Raxás, las rotondas de Cortiñán o la mejora del Regueiro”.
“Las visitas están muy bien si se traducen en avances y mejoras para Bergondo, no solo para hacerse la foto. Menos foto y más gestión”, concluyó el portavoz nacionalista.