El BNG alerta de los peligrosos vertidos de graneles en la AC-10 y pide al Gobierno Local que actúe
El BNG de A Coruña ha trasladado al Gobierno local una nueva advertencia sobre los problemas de seguridad vial derivados de los frecuentes vertidos de graneles en la carretera del puerto, especialmente en el entorno de la rotonda de Oza y en el tramo de la AC-10 comprendido entre dicha rotonda, el nudo de Casabranca y el túnel de Eirís.
A través de un ruego oral que será presentado en el Pleno municipal de junio, el portavoz nacionalista Francisco Jorquera alerta del peligro que estos vertidos suponen para la seguridad de las personas usuarias de la vía, especialmente ciclistas y motoristas, que ven incrementado el riesgo de accidente debido a la presencia de estos materiales en la calzada.
Según explica Jorquera, el origen del problema está en el elevado tránsito de camiones que acceden o salen del puerto coruñés transportando graneles, en muchos casos con exceso de carga o sin una cobertura adecuada, lo que provoca que parte de la mercancía acabe esparcida en la carretera.
Ante esta situación, el BNG reclama al Gobierno local que tome la iniciativa y realice las gestiones necesarias ante las administraciones responsables de la infraestructura, en concreto la Autoridad Portuaria y el Ministerio de Transportes y Movilidad Sostenible —titular de la AC-10—, con el objetivo de poner fin a esta problemática.
La formación nacionalista considera urgente actuar para garantizar unas condiciones mínimas de seguridad en esta vía estratégica para el tráfico metropolitano y portuario, e insiste en la importancia de una coordinación eficaz entre administraciones para evitar que se repitan este tipo de incidentes.