Betanzos instalará cámaras de control de tráfico en el casco histórico y limitará el acceso de no residentes a tiempo

ACoruñaXa
Las cámaras controlarán accesos y salidas, incluyendo un período de prueba para ajustar el sistema
Imaxe do Casco Histórico de Betanzos
8 Jan 2025

El gobierno local de Betanzos propone un plan para reordenar el tráfico en el casco histórico mediante la instalación de cámaras de control de accesos. El objetivo principal de la propuesta es potenciar el uso peatonal de las calles del centro histórico, mientras se regula la circulación de vehículos para permitir gestiones comerciales y personales de manera equilibrada.

La propuesta, actualmente en fase de estudio y abierta a aportaciones, ha sido presentada a las asociaciones de comerciantes de la ciudad. “No buscamos un corte total del tráfico, sino una convivencia regulada”, explicó el Ayuntamiento.

El plan incluye la instalación de cámaras en puntos estratégicos como la Porta da Vila, los arcos de Ponte Nova y Ponte Vella, y Cabildos. Estas cámaras registrarían la entrada y salida de vehículos, permitiendo el acceso sin restricciones a los residentes, mientras que los no residentes dispondrían de un tiempo limitado, aún por concretar, para realizar gestiones como dejar o recoger niños en la guardería o el Conservatorio Municipal, o visitar la farmacia. Superado ese tiempo, las cámaras emitirían sanciones automáticas.

Otra de las medidas propondrá restringir el tráfico en la calle Prateiros, donde solo se permitirá el acceso a residentes para evitar su uso como atajo. Los vehículos no autorizados que circulen por esta zona y hagan caso omiso a las señales de prohibición serán sancionados.

Como parte del plan, el Ayuntamiento implementará un período de prueba para ajustar el funcionamiento del sistema y permitir que los conductores se adapten a las nuevas medidas. Además, se instalarán cámaras en otras zonas de la ciudad para el control y vigilancia del tráfico, sin sistema de sanción.

El gobierno local también desmintió rumores sobre una supuesta restricción total de tráfico en la avenida de Castilla a su paso por la plaza García Irmáns, asegurando que esa medida nunca fue contemplada en el proyecto.

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